Marcelo González Martín

Emmo. y Rvdmo. Dr. D. Marcelo González Martín.
(1918-2004)

Nacido en Villanubla (Valladolid), en 1918, estudió en el seminario de aquella ciudad y se doctoró en Teología por la Universidad Pontificia de Comillas. Fue ordenado sacerdote en 1941, ejerciendo la docencia en el Seminario de Valladolid y en las Facultades de Derecho y Medicina, de las que fue además capellán.
Hombre de gran energía y fuerte temperamento, fue nombrado Obispo de Astorga en 1961, y permaneció en esta diócesis durante seis años de intensísimo fruto pastoral y de profunda labor social; participando en las sesiones del Concilio Vaticano II.

En 1966 fue designado por S.S. Pablo VI Obispo Coadjutor de Barcelona, pasando en 1967 a ocupar el Arzobispado. De nuevo su labor en aquella sede fue muy importante, con contribuciones decisivas, como fueron la creación de la Facultad de Teología de Barcelona y la nueva reorganización de la Archidiócesis, no faltando cierta oposición por parte del clero catalanista.

En 1971 sucedió al Cardenal Enrique y Tarancón en la Sede Primada de Toledo, donde permaneció veintitrés fructíferos años. En 1972 fue nombrado Consejero de Estado, y elegido miembro de número de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas. Fue ingente su labor apostólica en Toledo, de cara a los religiosos, con el impulso a los seminarios que potenció y levantó, y de cara a los seglares, creando publicaciones como el semanal “Padre Nuestro”, y la emisora pionera “Radio Santa María de Toledo”.

Reorganizó la procesión solemne del Corpus Christi en Toledo, trasladando su celebración del jueves al domingo, y abordó la rehabilitación del rito litúrgico hispano-visigodo o mozárabe. Impulsó la conservación del patrimonio de la diócesis, así como los procesos de beatificación de los mártires de Toledo de la Guerra Civil.

Fue miembro de la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Española y en 1973, S.S. el Papa Pablo VI le ordenó Cardenal, con el título de San Agustín, en Roma. Como tal Cardenal participó en los cónclaves de elección de los Papas Juan Pablo I y Juan Pablo II, manteniendo cordiales relaciones con este último, al que por expreso encargo suyo, representó en numerosas ocasiones. Presentó su dispensa en 1993, y le fue aceptada en 1995, retirándose a su residencia en Fuentes de Nava (Palencia), en donde le llegó la muerte en el año 2004.

Fue un gran orador desde sus primeros años de sacerdocio. Allá en su Valladolid natal, arrastraba a la gente que llegaba a abarrotar las naves de la Catedral en sus misas dominicales. Siempre estuvo muy ligado a la Acción Católica y a Cáritas. Recibió muchos premios y distinciones civiles, y fue una persona muy querida, incluso por quien no compartía sus ideas. Está enterrado en la Catedral de Toledo.